El SEO técnico son todas las acciones que tienen como objetivo indexar una página web y que sea fácilmente rastreable por los buscadores.
El SEO (o posicionamiento orgánico) es uno de los temas más desconocidos del marketing digital. Muchas personas están familiarizadas con el manejo de redes sociales o las campañas de publicidad en Google, pero no así con SEO. Derivado de eso, en los últimos meses, me he dedicado a escribir sobre este tema, con el fin de difundir el conocimiento al respecto.
Repasando en el concepto, SEO (acrónimo de Search Engine Optimization u optimización orgánica en motores de búsqueda) es una técnica de posicionamiento en buscadores web, que no paga por clics. Su metodología se basa en ofrecer al usuario, contenido de calidad que pueda responder las consultas hechas en un buscador. Sin embargo, esto es sólo una parte de la “magia”. La otra razón por la cual vemos una página web en los resultados de Google, Yahoo o Bing mejor posicionada que otra, que aborda la misma temática, en gran parte se debe al SEO técnico.
¿Qué es el SEO técnico?
Son todas las acciones llevadas a cabo en el sitio web o blog, que no tienen que ver con la creación del contenido y que ayudan a su indexación. Es decir el SEO técnico está enfocado en “los fierros”, “tras bambalinas”, es trabajar en la estructura del sitio, su mapa, su código… es decirle a Google y el resto de buscadores “¡Hey yo tengo la respuesta a la pregunta que te hicieron!”
En otras palabras, SEO técnico se relaciona con lo que los algoritmos detectan.
Aspectos relacionados con SEO técnico
A continuación enlisto algunos de los aspectos más importantes en el SEO técnico:
- Formato responsivo. En la actualidad las búsquedas desde teléfonos inteligentes representan más del 60% en comparación con las que se hacen desde computadoras. Por lo tanto, es crucial que todas las páginas de un sitio web sean responsivas y se desplieguen correctamente en pantallas pequeñas sin miniaturizarse.
- Velocidad de carga. Los segundos en que tarda en cargar o verse el contenido (texto e imágenes) de una página web es crucial para que las personas permanezcan y lean el contenido o lo abandonen. Y sí, la diferencia la hacen unos cuantos segundos.
- Seguridad al navegar. Si un sitio no cuenta con un certificado SSL, que se distingue por la “s” después del http en su dirección (URL), los algoritmos le restarán relevancia ante sus competidores. De acuerdo a la empresa de antivirus Kaspersky, un SSL (Secure Sockets Layer o Capa de sockets seguros), es un certificado digital que autentica la identidad de un sitio web y habilita una conexión cifrada.
- Código. Google y el resto de motores de búsqueda necesitan entender de qué se trata cada página web y para ellos no sólo basta que tenga una estupenda redacción. Es necesario que el código de programación sea lo más claro para los algoritmos. Se sabe que aunque Google “entiende” JavaScript, pero prefiere HTML. A través del código instalamos títulos, descripciones y mapas de sitio que sólo los buscadores web deben comprender.
Como pudimos ver, el SEO no sólo involucra la creación de contenido original y atractivo al lector, es de suma importante que todas las piezas que conforman cada página web funcionen correctamente y en armonía.